Viajar a Montreal es hacerlo, sin duda alguna, a la ciudad más europea que se pueda encontrar más allá de las fronteras del Viejo Continente. De hecho, para que te hagas una idea, se trata de la tercera ciudad con mayor número de personas que hablan el francés de todo el mundo. Cuenta con más de 300 años de historia y su nombre procede del 'Mont-Royal' o 'Monte Real', el cual se encuentra dentro de su territorio.
Sin duda, tomar un vuelo a Montreal es sinónimo de disfrutar de unas vacaciones increíbles en una de las urbes más cosmopolitas y espectaculares no solo de Canadá, sino de todo el mundo. Una oportunidad que, si está a tu alcance, no deberías desaprovechar.
¿Al fin te has decidido a comprar un vuelo de Madrid a Montreal con el propósito de disfrutar de unas vacaciones inolvidables? Si es así, enhorabuena. Sin embargo, puede que te hayas detenido a reflexionar acerca de cuándo visitar Montreal. No te preocupes, aquí vamos a contártelo.
El invierno en Montreal es especialmente largo y frío. De hecho, dura desde principios de noviembre a finales de marzo y suele nevar con asiduidad. Esto echa para atrás a muchos viajeros pero, si te gusta la nieve y estás acostumbrado a las bajas temperaturas, la estampa de la ciudad que podrás disfrutar te dejará sin palabras. En cualquier caso, la primavera es la época preferida por los turistas ya que las temperaturas oscilan entre los 15 ºC y los 22 ºC y la nieve comienza a derretirse dejando a la vista un paisaje bellísimo.
Otra opción es el verano, aunque suele hacer bastante calor. De hecho, es frecuente que se superen los 30 ºC durante los meses de julio y agosto. En definitiva, si te gustan los climas templados y no has decidido, aún, cuándo viajar a Montreal, escoge la primavera o el otoño. ¡Disfrutarás de paisajes únicos!
Sinceramente, no creemos que haga falta buscar demasiadas razones para visitar Montreal. Esto se debe, fundamentalmente, a que se trata de una de las ciudades más interesantes de Canadá. Sin embargo, si no opinas igual, aquí vamos a darte algunos argumentos de peso para que la escojas para tus próximas vacaciones:
Podríamos estar horas dándote motivos para que visites Montreal. Sin embargo, consideramos que estos son más que suficientes. ¡Saca los billetes y empieza a preparar las maletas!
Es posible que, a pesar de haber decidido ya el destino de tus vacaciones, aún no hayas preparado el itinerario. Si es así, echa un vistazo a este glosario de cosas que hacer en Montreal:
Las palabras no hacen justicia a lo mucho que pueden aportar a tu viaje estos lugares. Y es que, cuando los veas con tus propios ojos, quedarás obnubilado.
Antes de comentarte qué comer en Montreal, debemos decirte que, dentro de la ciudad, se cuida al máximo la calidad de la comida. De hecho, los restaurantes que encontrarás en tu visita lucirán radiantes y te servirán platos de excelente presentación.
En cualquier caso, los platos típicos de Montreal son tres. El primero de ellos es la poutine, que está formado por una base de patatas fritas con salsa de carne y queso a la que se añaden champiñones, salchichas, maíz... todo a gusto del consumidor. Por su parte, los bagels son una especie de rosquillas de pan rellenas que también son propias de la ciudad.
Finalmente, sólo queda hacer mención al pastrami, que consiste en un plato de carne ahumada y sazonada. Suele comerse metida en un sandwich y está deliciosa. ¡Qué aproveche!