Search Icon
CMP
Default Image

ave rentabilidad

La Alta Velocidad en España es un caso muy destacado a nivel internacional, pues nuestro país es el líder a nivel mundial en este medio de transporte. Esto considerando el número de kilómetros de vía del AVE en relación al número de habitantes y de tamaño del país.

En 2010 España pasó a ser quien contaba con la red más extensa de Alta Velocidad en toda Europa, concentrando un 44 % del total de vías, en funcionamiento o en construcción, de la Unión Europea.

Sin embargo, es necesario tener en cuenta que se trata de obras de un coste elevadísimo, habiéndose invertido hasta 2010 alrededor de 50.000 millones de euros (sin contar con el coste de los trenes). Además, las previsiones de inversión superan los 82.000 millones de euros.

No solamente se trata de los enormes gastos para la puesta en marcha de las distintas líneas, sino que estas infraestructuras requieren de un mantenimiento que supone asimismo altas cifras. Se calcula que estos costes significan inversiones de 33.000 euros anuales por kilómetro de vías.

Unido a esto, nos encontramos con que en el caso español el uso de estos servicios de trenes veloces se utilizan mucho menos que en otros países. De ahí que existan serios problemas de rentabilidad en el AVE. Pues si en Francia, por ejemplo, la Alta Velocidad registró 113 millones de usuarios, en España el tráfico se quedó en los 16 millones de pasajeros (refiriéndonos a datos del año 2008).

Únicamente la línea que circula entre Madrid y Barcelona se acerca a los criterios de tráfico necesarios para que garantizar su rentabilidad, según el informe elaborado por la Comisión Europea.

Habrá que esperar para analizar el funcionamiento de las nuevas líneas y de aquéllas que se hayan en construcción, pero en estos momentos existen dudas sobre una Alta Velocidad con buenas tasas de retorno en los servicios en España.

CMP