La línea AVE Madrid-Segovia-Valladolid es uno de los grandes ejes vertebradores de la Alta Velocidad no sólo por unir las citadas provincias sino porque se prolonga hacia el norte, conectando la cornisa cantábrica con la capital. Tan larga e irregular -por la orografía- distancia provoca que sea una línea con importantes obras de infraestructura, algunas de mayor magnitud que otras.
El túnel de Tabladillo no es, ni mucho menos, de las más importantes pero aporta su granito de arena. Corresponde al tramo Olmedo-Segovia/Guiomar, en el subtramo que une los términos municipales de Santa María la Real de Nieva y Ortigosa del Pestaño, que en su momento se presupuestó en 53.617.251,64 euros, dedicándose la mayor parte a la construcción del susodicho túnel.
Èste atraviesa el cerro del Montecillo con una montera que varía entre los 12 y los 50 metros de altura, para una longitud total de 2.725 metros. Es de vía doble con sección libre interior de 100 metros cuadrados, un tramo central excavado en mina de 1.113 metros y otros dos laterales de túnel artificial que miden 697 y 704 metros respectivamente.
La empresa encargada de los trabajos fue Tabladillo U. T. E.
Foto: skyscrapercity
