Renfe ha anunciado que, a partir del próximo 17 de junio, se eliminarán cuatro conexiones ferroviarias de la línea entre Madrid y el País Vasco. Se trata, por un lado, de dos trayectos con origen en Segovia-Guiomar que conectan con Valladolid, Burgos, Miranda del Ebro, Vitoria-Gasteiz, Zumárraga, San Sebastián, Irún y Hendaya. Los otros dos trenes que serán suprimidos realizan el trayecto en sentido inverso.
A raíz de esta “mala noticia”, la Junta de Gobierno del ayuntamiento segoviano ha aprobado una declaración institucional para hacer una reclamación formal a la empresa que se mantengan las paradas en esta ciudad.
Según señalaba el alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes, se teme que este anuncio sea solamente el comienzo de cancelaciones sucesivas de conexiones con parada aquí. La consecuencia última que temen desde este ayuntamiento es la posibilidad de que la estación del AVE de Segovia se convierta en una estación “fantasma” y que la ciudad se quede aislada.
Por otro lado, se ha expresado el malestar de los viajeros ante esta medida. Uno de los usuarios frecuentes de estas conexiones mostraba su desacuerdo con el hecho de que estos trenes no paren más aquí pero sigan parando en Burgos, donde se registra un menor número de pasajeros.
Arahuetes afirma que no entiende el por qué de esta decisión, pues se trata de quitar a la ciudad algo que “no cuesta dinero”, siendo su único coste los tres o cuatro minutos más de viaje por realizar la parada.
