Ya hemos visto hace poco cómo, para la línea del AVE Madrid-Valencia que se inaugura dentro de menos de un mes, Renfe dividía los asientos entre clase Turista y Business. Esta división nos muestra que la intención de la empresa es cubrir el papel que hoy en día desempeña el avión en esta ruta.
Esto se deja ver aún más claramente en cuanto al sector de negocios, ya que la oferta de Renfe se dirige especialmente a este segmento de pasajeros.
La razón es fundamentalmente que, hoy en día, la mayoría de los viajeros que realizan el trayecto entre la capital y Valencia (en concreto, un 68 %) lo hacen por motivos de trabajo. Y gracias a la Alta Velocidad, se espera que el número se incremente hasta que la proporción pase a ser del 81 % de pasajeros de negocios.
Una de las claves en la estrategia de Renfe está en ofrecer a este segmento de viajeros la posibilidad de hacer viajes de ida y vuelta en el mismo día. Esto supondría una gran ventaja, puesto que los pasajeros se desplazarían hasta Valencia pero no tendrán la obligación de pagar un alojamiento allí sino que podrán volver a su ciudad dentro del mismo día.
A través de esto, la posibilidad de ahorrar en hoteles, es que Renfe justificaría el aumento en el número de los pasajeros business.
